
Por Aniel Bigio
Especial para Miprv.com
Año tras años las autoridades estatales y grupos ambientales exhortan a la ciudadanía a disfrutar de la Noche de San Juan pero con moderación y salvaguardando la libre participación y convivencia de todos y todas.
Esta vez en particular, el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) solicitó a las personas que participarán de las actividades de esta emblemática celebración a no dejar basura y, sobre todo, cuidar los nidos de tinglares que ubican en las playas del área metropolitana.
Durante esta temporada, decenas de tortugas viajan largas distancias buscando clima cálido para poner sus huevos. Las playas de Isla Verde y Condado son sede de varios nidos que pueden tardar varias semanas en ver nacer a las crías.
El DRNA informó que 34 nidos ubican en las principales playas de la zona metro, cifra récord para la temporada, de acuerdo a Carmen Guerrero Pérez, secretaria de Recursos Naturales y Ambientales.
La titular de la agencia exhortó a cambiar la mala conducta de tirar basura y pensar que otro irá a recogerla. De esta forma, sostuvo, se conservan las costas y se aprende a convivir en espacios que los seres humanos comparten con especies marinas que, en el peor de los casos, mueren por la basura que algunos dejan.
“Las bolsas y las botellas plásticas, los aros de plástico de las bebidas enlatadas y las neveritas desechables son una amenaza para las tortugas marinas como el tinglar, el peje blanco y el carey, que son especies en peligro de extinción. Estas tortugas, al igual que otras especies, consumen estos materiales al confundirlos con aguas vivas o medusas o, simplemente, se enredan en ellos”, explicó la planificadora.
“La basura se convierte en una barrera que impide que las tortuguitas que nacen puedan llegar al mar y mueran por deshidratación, inanición o por quedar expuestas a que otro animal (como un perro) se las coma”, abundó.
Destacó, de igual forma, que las personas no deben acercarse a las áreas demarcadas para no perturbar los nidos. De usted observar un tinglar, no debe acercarse y debe llamar de inmediato al Centro de Mando del Cuerpo de Vigilantes del DRNA.
El año pasado en Puerto Rico se reportaron sobre 2,000 nidos de tinglares, número que superó la cifra de hace dos años. A la fecha, sobre 1,720 nidos se han registrado en toda la Isla y se espera que continúe en aumento.
Durante la Noche de San Juan se contará con efectivos del Cuerpo de Vigilantes del DRNA, quienes trabajarán conjuntamente con la Policía de Puerto Rico y los agentes municipales para dar patrullaje en las playas donde se han reportado nidos de tortugas marinas. Además, se unirán empleados de otras divisiones municipales, tal como en el caso del Municipio de San Juan.
La Red Tortuguera de Puerto Rico compuesta por 11 grupos alrededor de toda la isla y decenas de voluntarios—adiestrados por el DRNA y que cuentan con un permiso especial para manejar estas especies en peligro de extinción—estará durante toda la temporada de anidaje del tinglar y otras especies de tortugas marinas, dando el máximo por conservarlas y protegerlas.
“Todos vamos a disfrutar de las playas esta nochey el resto del verano, pero vamos a hacerlo con la conciencia de que ese es el hábitat de muchas especies marinas que debemos respetar. Solicitamos a la ciudadanía a dejar esas playas mejor de lo que las encontraron, a llevarse la basura, a reciclar y a que no se acerquen bajo ningún concepto a los nidos o a las tortugas marinas”, recalcó Guerrero.
Dijo, además, que si una persona tiene la maravillosa experiencia de divisar una tortuga en su camino a desovar (hacer su nido) o a los pequeños neonatos cuando van saliendo del nido en su trayecto al mar, deben alejarse a una distancia prudente y permitir que ocurra el proceso sin intervención humana.
Guerrero Pérez solicitó a las personas a llamar al centro de mando del Cuerpo de Vigilantes del DRNA al 787-724-5700 en caso de ver tortugas marinas.
Recordó, de igual forma, que matar, dañar, molestar, atrapar, comprar o vender una tortuga marina o parte de ella, como los huevos es un delito estatal y federal que puede conllevar una multa de hasta $50 mil o hasta 10 años de prisión.