Por Aniel Bigio
Especial para Miprv.com
A pocos días para que culmine el término de aprobar proyectos legislativos, el Senado pretende evaluar una medida aprobada ya en la Cámara de Representantes que ha levantado la preocupación de grupos ambientalistas en la isla.
Se trata del Proyecto bipartita 2894 que demarcaría la zona del Caño Tiburones, autoriza el bombeo para la construcción de una carretera en el área y otorga nuevas instrucciones al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), pero no asigna fondos para esa gestión.
Luego de su aprobación en la Cámara baja, la pieza legislativa llega este miércoles al Senado donde se discutirá en vistas públicas, como solicitó desde su presentación la Sociedad Ornitológica Puertorriqueña (SOPI). No obstante, la portavoz de ese grupo, Ela Cruz Nazario, denunció a este medio digital que de ese cuerpo legislativo dieron instrucciones para que las posturas de los deponentes no sobrepasara los 7 minutos.
“Hoy (martes) nos notificaron que la cantidad de tiempo para deponer es de siete minutos por la cantidad de ponentes que hay. Uno tratar de hablar de este proyecto en siete minutos, es bien complicado poder profundizar y hacer una exposición completa. El tiempo que queda es muy poco y en el Senado tienen que hacer el análisis para bajarlo a votación. Es apresurado”, indicó Cruz Nazario a Mi Puerto Rico Verde.
“Nosotros estamos haciendo nuestro trabajo con los senadores, dejándoles saber nuestras preocupaciones y planteamientos sobre el proyecto. El tiempo que nos han dado es poco y estamos trabajando contra el reloj. Estamos preocupados por lo que expone la medida, aunque estamos más confiados que el Senado la evalúa de forma más responsable”, agregó.
SOPI y otros grupos ambientalistas sostienen que la pieza legislativa, presentada por Ricardo Llerandi, Gabriel Rodríguez Aguiló y Cesar Hernández Alfonzo, fue aprobada en la Cámara sin análisis y de forma expedita. Esos legisladores justificaron su postura al asegurar que escucharon la opinión de agricultores y vecinos del área sobre el proyecto.
“Si se aprueba tal y como está, lo que va a generar es un efecto nefasto y un precedente malo para los humedales de Puerto Rico, no solo del Caño Tiburones. No vamos a tirar la toalla, seguiremos trabajando”, sostuvo la portavoz.
El Caño Tiburones es un área de humedal que se extiende por la región del karso norteño, entre Arecibo y Barceloneta, por un espacio aproximado de unas 4,800 cuerdas de terreno y se alimenta tanto de aguas superficiales como subterráneas.
El lugar es hábitat para una variedad extensa de especies nativas y migratorias, entre las que se encuentran la gallareta, el pato chorizo, la tigua y la chiriría.